El pasado 10 de febrero el área de la mujer
de la FAC (Federación Andaluza de Comunidades)
junto con la Asociación de Mujeres Cofrades
de Barcelona, volvieron a organizar conjuntamente
y por segundo año consecutivo la celebración
de Santa Águeda, patrona de la mujer.
El acto que tuvo lugar en la Iglesia de María
Magdalena de Viladecans, dio comienzo pasadas las
11 de la mañana con los saludos de la responsable
del Área de la Mujer de la FAC, la Sra. Josefa
Delgado y la presidenta de la Asociación de
Mujeres Cofrades la Sra. Gloria Codina, que dio paso
a la secretaria de la misma asociación, la
Sra. Nuria Borraz la cual dio lectura del curriculum
a modo de presentación de la ponente de la
jornada, la Sra. Marisol González Triviño,
perteneciente a la institución Teresiana de
Barcelona.
Marisol González, empezó su exposición
realizando un recorrido por los diferentes territorios
de la Palestina coetánea de Cristo, dando a
conocer el carácter y los rasgos más
distintivos de cada uno, para luego pasar a los grupos
de personas que conformaban la sociedad del momento,
donde de manera diferencial se encontraba la mujer,
la cual por si sola, formaba un colectivo aparte dependiente
en todo momento de un hombre ya fuera padre, esposo
o hermano. Colectivo marcado por unas limitaciones
con las cuales ya se nacía y donde no había
esperanza de que nunca cambiaran.
En medio de este panorama tan gris para la mujer surgió
la figura de Cristo, que si bien es verdad no elige
a ninguna como apóstol, no es menos cierto
que les da un papel relevante en toda la logística
de su predicación y lo que es más importante
las dignifica y escucha en sus reivindicaciones.
Ejemplos como el dedicar atención a una pecadora
como María Magdalena, dándole el mismo
estatus que cualquier otra persona, o detenerse a
escuchar a la Samaritana, la cual unía a su
condición de mujer la de su procedencia, pues
hemos de recordar que los habitantes de Samaría
eran tenidos como los más marginales de los
territorios judíos. O como no, la defensa de
la mujer adúltera, ponen de manifiesto el compromiso
de Jesús con la búsqueda de la dignidad
de la mujer que ha de ser la misma que el hombre.
Podemos concluir que la charla fue seguida con interés
por los asistentes y que aun siendo erudita resultó
amena en su estructura y desarrollo. Felicidades Marisol.
Acabada la charla tanto la FAC como la Asociación
de Mujeres agradecieron el empeño puesto en
la misma por Marisol González y la obsequiaron
con sendos recuerdos e inmediatamente se pasó
a la celebración de la Eucaristía presidida
por el rector de la parroquia Mn. Fredi Esteve acompañado
del diacono Mn. Josep María Gómez. Al
acabar la Eucaristía tuvo lugar la bendición
de las célebres tetillas de Santa Águeda,
una especie de pastelitos que recuerdan el martirio
de esta mártir italiana del Siglo III a la
cual le fueron cortados los senos por no renunciar
a sus creencias y oponerse a los deseos del procónsul
Quintianus. Después de bendecidos los pastelitos
fueron repartidos entre los asistentes a la Eucaristía.
Acabó el acto con un pequeño refrigerio
donde compartieron conversaciones, anfitriones, organizadores
y asistentes.
A destacar la asistencia de personas a la charla entre
los que hay que destacar miembros de las Juntas directivas
de la FAC y la Asociación de mujeres cofrades
de Barcelona, además de la Delegada Diocesana
de Formación y Acompañamiento del Laicado,
el Director del Secretariado Diocesano de Hermandades
y Cofradías de Barcelona, miembros del Consejo
de hermandades, representantes de la Institución
Teresiana de Barcelona, así como presidentes
de la Hermandad de Jesús Nazareno y Virgen
de los Dolores de Badía del Vallés,
de la Hermandad de Jesús del Gran Poder y la
Esperanza Macarena de Barcelona, así como representantes
de la Casa de Granada de Barberá del Vallés.